Bienvenidos a ATIMANA-DAH.

ATIMANA-DAH lucha cada día por y para las personas que se ven afectadas por el TDAH, desde el ámbito familiar, escolar, social e institucional.

Pueden contactar para cualquier consulta sobre este blog en el correo: secretariaatimana@gmail.com

No olvides visitar nuestra web: http://www.atimana.org/pagina-principal/




ASÓCIATE

ASÓCIATE
Juntos somos más, juntos podemos más

TÉCNICAS DE ORGANIZACIÓN PARA ADULTOS CON DÉFICIT DE ATENCIÓN



El TDAH es un trastorno crónico por lo que se perpetua hasta la edad adulta.
Hasta no hace mucho se consideraba un trastorno tan solo infantil, por lo que muchos afectados dejaban de recibir tratamiento llegada la adolescencia o una vez cumplida la mayoría de edad.
Todavía hoy el TDAH en la edad adulta es una asignatura pendiente, pero cada día se continúa con la atención de los afectados una vez llegan a la edad adulta, o se detentan casos de TDAH en adultos.

Muchas veces nos encontramos casos en los que refieren esa falta de organización, ese quiero hacer esto y aquello pero al final no consigo terminar nada. Aún sabiendo bien que hay que hacer, cuesta priorizar y se termina por no realizar ninguna tarea por completo. Todo esto crea frustración y culpabilidad.

Para conseguir solucionarlo hay algunas estrategias que pueden ayudar al adulto con TDAH:

Lo primero y la mejor opción es crear una planificación diaria de las tareas.

Luego toca priorizar cada una de esas tareas.

¿Qué podemos hacer?

1. Anotar todas las tareas pendientes y mantener actualizada esta lista (borrar lo hecho y anotar lo nuevo).

2. Establecer un hora para revisar y actualizar nuestra lista.

3. Si vemos que alguna de las tareas apuntadas resulta complicada y consta de varios pasos, puede ser mejor dividirla en varias tareas más sencillas.

4. Comprobar que tareas tenemos para el día siguiente y cuanto tiempo necesitamos para ello.

5. Decidir que es lo primero de la lista, establecer prioridades.

6. Actualizar la lista de tareas independientemente de su urgencia o prioridad.

Pero, establecer prioridades puede ser complicado. Para ello podemos utilizar la solución que nos plantea Juan Sangüesa El ABC de las prioridades:

Lo primero es dividir las tareas en tres grupos según sea su importancia.
En el grupo A incluiremos todas las actividades que tenemos que realizar hoy o mañana.
En el grupo B incluiremos las actividades que tenemos que terminar en los próximos días o que necesitan más tiempo para realizarlas.
Y en el grupo C incluiremos las tareas de menor importancia.

Para priorizar las tareas debemos leer atentamente nuestra lista y pensar en cada actividad para ver si es urgente o se puede postergar.
Conforme vamos viendo si es urgente o no, anotaremos al lado de cada actividad A, B, o C según sea su importancia.

No podemos empezar con las tareas del grupo C hasta no haber terminado con las del B, ni comenzar con las del B hasta haber terminado las del A.

Es importante actualizar la lista cada día pues las tareas pueden haber cambiado su categoría y las que antes estaban en B ahora estar en A, porque deben hacerse para hoy o mañana.

De esta forma conseguimos   “poner en primer lugar lo primero”,  como decía Barkley.
Así evitamos una lista interminable de tareas, no saber por donde empezar, emplear nuestro tiempo en cosas que podrían hacerse más tarde y ver como otras tareas más urgentes quedan por hacer.

Para conseguir que este método funcione, que nos sea fácil ponerlo en marcha, debemos conseguir convertirlo en un hábito y por tanto debemos hacerlo cada día. La clave es la paciencia y la práctica constante. Con la repetición sistemática conseguiremos hacer de esto una rutina más.


Fuentes de consulta: Juan Sangüesa y Jenny Guerra Hernández 




No hay comentarios: