Varias son las
publicaciones que han tratado este tema en los últimos días, desde blog especializados
a periódicos digitales como ABC salud o europapress.es salud.
Desde hace tiempo ya
el TDAH se ha relacionado con ciertas conductas como la adicción a drogas o
conductas delictivas. Estos estudios previos han demostrado que hasta dos
terceras partes de los jóvenes delincuentes y la mitad de la población penal adulta
presentaron síntomas de TDAH en la infancia y muchos todavía los manifestaban
en la edad adulta. Esto es una consecuencia de la forma en que se desarrollan
las características del individuo con TDAH a lo largo de su vida, pero es
importante señalar que se trata de derivaciones de un TDAH normalmente sin
tratar.
Según las últimas
investigaciones el comportamiento delictivo en adultos con TDAH se reduce
cuando son tratados con la medicación típica para este trastorno. En el TDAH se
usan básicamente fármacos estimulantes, concretamente el metilfenidato. Estos
medicamentos ayudan a controlar y regular los síntomas del TDAH como pueden ser
la impulsividad o los problemas de atención.
Este estudio fue publicado
en The New England Journal of Medicine sobre una muestra de 25.000 personas y
realizado por investigadores británicos y suecos. En él se pudo observar que
los delitos cometidos se redujeron alrededor de un tercio en las personas
medicadas con estos fármacos.
"La
conclusión es que la medicación condujo a una reducción del 32 por ciento en
las tasas de criminalidad en los hombres y una reducción del 41 por ciento en
las tasas de criminalidad en las mujeres", según Seena Fazel, psiquiatra forense de la
Universidad de Oxforf. Paul
Lichtenstein del Instituto Karolinska de Suecia explicó que los
resultados nos indican la necesidad de alentar a más pacientes con TDAH a tomar
los medicamentos referidos ya que podrían ayudar a reducir la delincuencia. Si las
posibilidades de reincidencia se reducen en un 30% evidentemente esto afectará
al total de delitos en muchas sociedades.
Philip Asherson
del Instituto Británico de Psiquiatría (no participante en la investigación) ,
afirmó que los resultados podrían apuntar a una forma costo-efectiva de ayudar
a los pacientes a mantenerse fuera de problemas.
Como siempre se trata de sopesar beneficios y costos en cada
persona, en este sentido, el investigador
Henrik Larsson, también del Instituto Karonlinska, recuerda que aún con los efectos que se han mostrado en
esta investigación los tratamientos
médicos pueden tener efectos secundarios adversos, por lo que los riesgos deben
sopesarse frente a los beneficios. En esta misma línea Philip Asherson
afirmó que la decisión sobre la medicación deber ser personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario